Si hay algo que está demostrado, es que los especialistas en Anestesia también saben a fondo de amistad. Conocen cómo alivianar las cargas del otro y saben encontrar las excusas ideales para rencontrarse fuera del quirófano y divertirse.
La comida, la música, la familia, los viajes y las actividades deportivas también marcan la agenda de los anestesiólogos que fortalecen los vínculos que comienzan entre el estudio o alguna cirugía.
Una dupla en la que desborda la amistad sin dudas es la que integra Paula Rubia y Laura Ortiz quienes pueden juntas contra todo. “Anoche tuve que ir a trabajar y la Chata se quedó con mi hijo”, con esa frase Paula comienza a describir la amistad que la une con su amiga Laura, “la Chata” para los amigos. Esa frase representa como conocen sus tiempos y sus responsabilidades. Muestra como se sostienen mutuamente en cada una de sus actividades diarias.
Laura asegura que “Pauli” es su hermana del corazón y entre los momentos más emocionantes que recuerda juntas fue cuando le dio anestesia en el día que su amiga se convirtió en mamá de Benicio.
Además de verse en sus casas o en un quirófano, también se encontraban en bares o lugares donde la “Chata” tocara con su banda. Esta dupla no excluye a hermanos de sangre y Paula contó que integran a veces a Alejandra “la chatita”, hermana menor de Laura.
El grupo de los asados
Pedro Varas contó que los encuentros con sus amigos anestesiólogos, cuando no están en quirófano, son alrededor de alguna parrilla. “En las juntadas generalmente hablamos de anestesia bastante y también de futbol, deporte, política u otros temas”, contó. Destacó que los que se ponen el delantal para hacer el asado por lo general son Javier Quinteros, Nicolás Terluk o Javier Torres.
Pedro mencionó que el grupo es grandes ya que todos tienen una excelente relación, pero hizo hincapié en su vínculo con “Sota, Jeremías, Nacho y Montilla” (Fabricio Sotarello, Jeremías Sanchez, Ignacio Riveros, Gonzalo Montilla). Con ellos compartió viajes a otras provincias o incluso visitaron otros países como España. A veces lo han hecho por fines ligados a la profesión y otras solo por entretenimiento.
Anita Juarez asegura que Tiago es su mejor amigo, con quien más comparte y habla de todo. Son amigos desde el primer año de Residencia y cuando no trabajan se juntan a comer o hacer alguna actividad física como caminatas o yoga. “Intentamos ayudarnos siempre tanto en el quirófano como afuera. Yo no soy de San Juan y al principio recibí su apoyo para adaptarme o ayuda económica cuando no podíamos cobrar”, contó la especialista que llegó desde Catamarca.
Un motivo de celebración, además del día del amigo, es que ya finalizaron la residencia. Ese brindis se vio postergados por los tiempos que manejan los trabajadores de salud en el contexto de pandemia y porque “Tiaguete” (como lo llama ella) comenzó a trabajar algunas semanas en Veladero. Esto hace que ya no se vean tan seguido pero Anita (también conocida como Juanita), afirma que la amistad de ambos está intacta porque tienen la capacidad de reinventarse para adaptarse a este tipo de situaciones.
Sebastián Moreno y Enrique Zorrilla son amigos desde el año 2006 cuando comenzaron a tocar juntos en su banda de rock. Si bien interpretaban canciones de diferentes artistas nacionales e internacionales, se destacaban por sus covers de Catupecu Machu. Así surgió esta amistad que luego se forjó aun más cuando ambos optaron por especializarse en anestesiología.
Antes habían sido compañeros en el cursillo de medicina pero afianzaron su vínculo gracias a la música. «Yo lo invité a tocar y me dijo que no y después cayó a un ensayo por otro amigo», recordó Sebastián con recelo. Ambos se unieron gracias al bajista de la banda, Martin Fernandez, quien también estudiaba medicina. Juntos compartieron tocadas en eventos o bares, hasta que Martín falleció y el nombre de la banda pasó a ser uno de sus mejores recuerdos juntos. Sebastián destaca esta pérdida y la de sus padres, «porque los dos perdimos a nuestros viejos con una enfermedad terminal y eso marcó la perspectiva nuestra. Te hace valorar las cosas de otra manera y te hace identificarte con el otro», mencionó Seba o «man» como se llaman con Enrique.